Cuando hablo con mi familia y conocidos acerca de la importancia actual de utilizar contraseñas seguras, prácticamente sigo escuchando lo mismo, que hace algunos años: «si, si ya la voy a cambiar«. Eso significa que es evidente que la/s clave/s utilizadas son muy básicas y/o fácilmente vulnerables.
Hay que comprender que las contraseñas son la primera línea o capa de defensa para proteger nuestra información. Y a medida que la tecnología avanza, los métodos que los hackers usan para robar contraseñas se vuelven más sofisticados. Esto significa que nuestras contraseñas también deben evolucionar para ser más seguras y difíciles de adivinar.
Veamos cómo era el tema de las contraseñas, por ejemplo, hace 10 años:
Contraseña: «123456» o «password»
Riesgos: Hace una década, muchas personas usaban contraseñas simples y fáciles de recordar. En aquel entonces, los hackers usaban métodos como «fuerza bruta» (probar muchas combinaciones posibles) o ataques de diccionario (probar contraseñas comunes) para acceder a cuentas.
Y ahora analicemos como cambiaron en general al día de hoy:
Contraseña: «P@55w0rD!2024»
Riesgos: Actualmente, los hackers utilizan herramientas más avanzadas, como algoritmos de aprendizaje automático y bases de datos filtradas con millones de contraseñas. Esto significa que contraseñas simples pueden ser descifradas en cuestión de segundos.
Consideremos que las contraseñas son necesarias en muchas situaciones cotidianas:
Dispositivos móviles: Protegen el acceso a nuestros teléfonos y toda la información almacenada en ellos.
Acceso a correos electrónicos: Protegen nuestra comunicación personal y profesional.
Banca en línea: Protegen nuestro dinero y datos financieros.
Redes sociales: Protegen nuestra identidad y privacidad en línea.
Aplicaciones de trabajo: Protegen datos sensibles y confidenciales de la empresa.
Muy importante:
Usar la misma contraseña en diferentes sitios es como tener una única llave para todas las puertas. Si un Hacker consigue esa llave, puede acceder a todas tus cuentas. Por ejemplo, si usas la misma contraseña para tu correo electrónico y para una red social, y esa red social es hackeada, los hackers también podrían acceder a tu correo electrónico y, desde allí, resetear contraseñas de otras cuentas.
¿Qué podemos hacer y cómo?
Dejar que aplicaciones específicas sean las que nos ofrezcan las mejores contraseñas y que siempre las tengamos al alcance de la mano, Para esto un gestor de contraseñas es una herramienta que almacenan y gestionan todas tus contraseñas en un solo lugar de forma segura.
Beneficios:
- Generan contraseñas fuertes: Pueden crear contraseñas complejas y únicas para cada cuenta.
- Almacenan de forma segura: Guardan las contraseñas en un «almacén» cifrado, protegiéndolas de accesos no autorizados.
- Facilitan el uso: Permiten acceder a tus cuentas rápidamente sin necesidad de recordar cada contraseña.
- Autenticación de dos factores: Muchos gestores también integran la autenticación de dos factores para una capa adicional de seguridad.
Hasta aquí te ofrezco una introducción a este tema que realmente es muy importante y que muchas veces, solo se lo considera cuando tenemos un evento de vulneración en nuestra información personal, profesional o laboral.
Si quieres saber más te invito a leer (haz clic aquí) acerca de cuál es el software que utilizo y porque.